Candelaria es uno de los destinos más emblemáticos de Tenerife, no solo por su belleza natural, sino también por su significado religioso y cultural. Este pintoresco pueblo, ubicado en la costa este de la isla, es conocido por ser el hogar de la Basílica de Nuestra Señora de Candelaria, donde se venera a la patrona de Canarias, la Virgen de Candelaria. Cada año, miles de peregrinos visitan este lugar sagrado, convirtiéndolo en un punto de encuentro espiritual que atrae a personas de todas las edades y culturas.
La Basílica es una impresionante obra arquitectónica que destaca por su majestuosidad y su cercanía al mar, creando una atmósfera única de serenidad. Frente a ella, en la plaza, se encuentran las estatuas de los menceyes guanches, los antiguos reyes aborígenes de la isla, lo que le da un toque histórico al lugar. Estas estatuas representan la importancia de la cultura guanche en la historia de Tenerife, y son un símbolo de respeto y conexión con el pasado de la isla.
Aparte de su valor religioso, Candelaria es un lugar encantador para disfrutar de un paseo por sus calles llenas de tradiciones canarias. El pueblo conserva su ambiente local con pequeños bares, tiendas artesanales y un paseo marítimo ideal para relajarse. Aquí, los visitantes pueden experimentar la auténtica vida canaria, rodeados de un paisaje costero espectacular. Candelaria es el lugar perfecto para quienes buscan una experiencia de paz, historia y cultura, combinada con la belleza natural de Tenerife.